Creencias limitantes: ¡ALERTA!
Seguramente ha oído hablar de las creencias limitantes, pero ¿sabe qué son realmente? Son ideas, opiniones o pensamientos negativos que consideramos como cierto, con la posibilidad de no serlo, provocando un condicionamiento en nuestra vida.
Más de una vez ha escuchado alguna frase como «Siempre me cuesta mucho llegar a fin de mes». Le sonará muy familiar. Incluso hasta usted puede tenerla como frase de cabecera. Este ejemplo es uno de tantos y pretende afectarlo cuando es simplemente una creencia.
Es sumamente importante prestarse atención en todas esas frases que uno dice como latiguillo. Ahí es donde se esconde un tesoro que vamos a descubrir en este artículo.
¿Cómo se forman las creencias limitantes?
Estas pueden formarse de las siguientes formas:
Experiencias pasadas.
Fracasos en el intento de realizar alguna acción, criticas recibidas en algún momento ó en base a la educación recibida.
Influencias del entorno.
Influencias de la familia, amigos, sociedad, cultura.
Interpretaciones erróneas de la realidad.
Interpretar eventos negativos de manera generalizada.
Veamos algunos ejemplos
- No soy bueno para aprender inglés.
- Soy un desastre para las matemáticas.
- No puedo hacer una exposición en público sobre un tema.
- No puedo conseguir un trabajo mejor.
Estas creencias son las limitaciones que tenemos impuestas y autoimpuestas que nos hacen creer que no podemos concretar metas/sueños/deseos. Si nos diéramos la posibilidad de reconocerlo como lo que es, una creencia, y más aún, una posibilidad para derribar esa barrera mental que tanto nos mantiene en esa incomodidad, daríamos el paso adelante trabajando en ello para tener el resultado positivo de un desbloqueo.
¿Cómo identificar una creencia limitante?
El proceso repetitivo que está a continuación cimenta las bases para una idea limitante
- Frases repetitivas.
- Pensamientos negativos.
- Sensación de no poder cambiar las cosas porque así son.
- Pruebas que confirman esta creencia.
Estrategias para superar una creencia limitante
1 – Esté alerta porque en cualquier momento puede manifestarse una afirmación negativa y es donde debe preguntarse si la misma es verdad. «No se me da bien en la cocina». ¿Realmente no se me da bien en la cocina?
2 – Reemplácelas por creencias potenciadoras. Cambie la afirmación negativa por una superadora. «Puedo mejorar con práctica»
3 – Exponerse a nuevas experiencias que desafíen esa creencia. Sume práctica para enfrentarse una y otra vez hasta que comience a ver resultados positivos y fracturen esa certeza.
Para culminar
Este tipo de limitaciones impuestas por la familia, la sociedad, la cultura, etcétera, nos restringen en cualquier tipo de acción que deseemos realizar. El poder identificarlas nos dará una ventaja y será una herramienta que usaremos a nuestro favor para desbloquear las barreras que no nos permiten avanzar.
Cuando entendemos que son solo programas implantados en el inconsciente y que podemos reprogramarlos para nuestro beneficio y que esa barrera se quite, entonces nos daremos cuenta cuán poderosos somos. Será entonces el momento en que comenzaremos a ver cada limitación como una oportunidad de mejora y un paso más cerca hacia donde queremos ir y a cómo sentirnos.
Aplicar las distintas estrategias para superarlas hará la diferencia entre dar un paso adelante y descubrir el mundo que se nos abre a nuestros pies o la muralla que no nos permitirá continuar.
Lo invito a identificar sus creencias limitantes y a poner en práctica todo lo expuesto y espero haberle sido de ayuda. Cuanto más sea capaz de reconocerlas y no seguir en piloto automático y sin detenerse, mejor se sentirá al verse como se supera cada día. ¿Cuál es la creencia limitante que le impide avanzar y va a atender desde ahora?